Medios Digitales

Reglas y consejos para homologar y mejorar el trabajo en plataformas periodísticas digitales.

Pautas Generales

Al escribir para la web, la calidad en la redacción y el respeto de las normas gramaticales debe ser el punto de partida, tal como en los medios impresos. Hay, sin embargo, ciertos consejos que optimizan el uso periodístico de una plataforma digital, más allá del texto.

No se trata de normas estáticas, pues así como internet está en permanente evolución, las audiencias van cambiando y adaptándose a las nuevas tecnologías. El uso de métricas permite conocer el comportamiento de las personas ante internet y mejorar los contenidos. Las técnicas de “eye tracking” (seguimiento visual) también han permitido constatar los cambios: un estudio de Nielsen Norman Group sobre sitios web no periodísticos arrojó en 2010 que el 80% de la gente no pasaba del primer pantallazo; en 2018 esa cifra bajó a 57%. Esto se debería, entre otras cosas, al uso de pantallas más grandes y al diseño de sitios web “responsivos” (que se adaptan a las distintas pantallas, incluyendo las versiones móviles).

En periodismo, solía afirmarse que los textos digitales debían ser cortos e informativos. Ahora se sabe que la gente sí lee textos largos cuando es cautivada por contenido relevante y de calidad. De hecho, hay estudios que demuestran que el periodismo de largo aliento digital engancha más a los lectores que los textos breves, por lo que es importante aprender a hacer atractivos los reportajes digitales. Aunque internet ha ido desplazando al papel como soporte, hay que pensar el periodismo digital como mucho más que texto, maximizando el uso de herramientas multimediales.

Además hay que estar atentos a la aparición de nuevas tecnologías o aplicaciones que cambian las dinámicas de la audiencia. El surgimiento de las redes sociales, por ejemplo, generó una nueva forma de contacto con el público y una entrada directa a los artículos, disminuyendo la relevancia de las portadas de los medios digitales. El periodismo debe aprender a lidiar con las nuevas tendencias para transformarlas en un activo.